(Foto archivo)
En la actualidad este padecimiento es una de las principales causas de muerte en mujeres a escala mundial; su origen es desconocido pero existen factores de riesgo como la obesidad, el estilo de vida y antecedentes familiares, que pueden colaborar con su aparición. Según las últimas estadísticas del Ministerio del Poder Popular para la Salud, en el país representa la principal causa de enfermedad y muerte por cáncer en las venezolanas, donde de cada diez mujeres diagnosticadas mueren cuatro.Las hormonas femeninas juegan un papel fundamental en el inicio y promoción de esta patología, el doctor Ricardo Paredes, médico cirujano oncólogo y mastólogo de la Unidad de Mastología de la Clínica Leopoldo Aguerrevere, asegura que “el desarrollo precoz, la menopausia tardía, las personas que nunca han tenido hijos, el primer embarazo en mayores de 30 años, la ausencia de lactancia, las terapias de reemplazo hormonal prolongadas y no controladas, entre otros, aumentan las posibilidades de desarrollarla”.
El cáncer de mama hormonosensible representa el 70% de todos los carcinomas mamarios. Existen terapias como la hormonoprevención que se utilizan para reducir la aparición de esta enfermedad en mujeres postmenopáusicas de alto riesgo, mediante el control de los niveles hormonales a través de fármacos inhibidores de la aromatasa que bloquean la síntesis del estrógeno, causante del crecimiento de los tumores de este tipo.
Comenta el especialista que “la creación de compuestos como el Examestane representó un paso importante en la utilización de nuevas maniobras hormonales en el tratamiento de este carcinoma en mujeres postmenopáusicas, puesto que demostró ser superior al Tamoxifen en sobrevida libre de enfermedad, y con el paso del tiempo aparentemente en la sobrevida global”.
En general, se ha demostrado a través de diversos estudios que los inhibidores de aromatasa ocasionan una disminución en más del 30% en la aparición de tumores en la mama. “En nuestro país, aproximadamente un 20% de las casi 3.500 pacientes diagnosticadas son menores de 40 años, pero alrededor de un 50% de las mismas son mayores de 50 años, probablemente con presencia de síntomas postmenopáusicos y susceptibles a este tipo de terapias”, comentó el Dr. Paredes.
En el reciente trabajo publicado por New England Journal of Medicine, Examestane para la prevención del cáncer en mujeres post – menopáusicas, se evaluó la posibilidad de desarrollar carcinoma mamario en un total de 4.560 mujeres postmenopáusicas con un promedio de edad de 67 años, para lo cual se les suministró Examestane contra placebo. Al concluir el estudio se comprobó que el compuesto reduce en 65% la incidencia anual de este mal.
Entre los principales efectos secundarios ocasionados por la hormonoprevención se encuentran calorones, insomnio, sudoración excesiva, artralgia y artritis. Es importante destacar que en los informes suministrados por las pacientes, estos síntomas no afectaron ni tuvieron gran impacto en su calidad de vida.
Para finalizar, el especialista resaltó que “los resultados mostrados en este estudio demuestran que el Exemestane ya forma parte del arsenal terapéutico con que contamos para prevenir el desarrollo de un carcinoma de mama, con un efecto demostrado en el estudio, una relación riesgo-beneficio muy buena y un excelente perfil de seguridad para ser administrado a las mujeres postmenopáusicas de alto riesgo para desarrollar esta patología”.
Noticias Relacionadas
- Nuevo procedimiento mejora la detección del cáncer de mama
- Las superheroínas tambien se hacen examen de mama (Imágenes)
- Científicos desarrollan una vacuna que ataca el cáncer de mama
- La prevención es la clave en la lucha contra el cáncer de seno
- Un cuarto de los casos de cáncer de mama y colon se evitarían con ejercicio
Comentarios
Publicar un comentario