Arqueólogos y expertos en cultura maya viajaron de Estados Unidos y Alemania para reunirse con colegas mexicanos en Mérida, donde se realizó el simposio “El tiempo en el pensamiento maya”. El tema ha ido apareciendo con más frecuencia últimamente, considerando que estamos a tres meses de que se termine el año, donde muchos han pronosticado que el 21 de diciembre se terminaría el mundo de acuerdo a una supuesta profecía.
“Los mayas hicieron profecías, pero no en un sentido fatídico, sino sobre eventos que, de acuerdo con su concepción cíclica de la historia, se podían repetir en el futuro”, señaló Alfredo Barrera, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Los mayas usaban un calendario de cuenta larga para calcular periodos grandes, llamado Tziikhaab. A su vez, este incluía medidas de tiempo llamadas baktún, correspondientes a 144.000 días. En el calendario, 13 baktunes (5.125 años) constituían una “era” dentro del calendario, y de acuerdo a este cálculo del tiempo, el 21 de diciembre se terminará la quinta era del universo según los mayas, y se iniciará otra.
Lo del fin del mundo, dice el antropólogo de la Universidad de Quintana Roo, Alexander Voss, “son pensamientos que, la verdad, no tienen nada que ver con la cultura maya. Amanecerá una nueva era. Es un reinicio. Eso de buscar fines no es una cosa de la cultura maya”.
De hecho, hace poco se encontró otro calendario que incluye 17 baktunes en lugar de 13, lo que indicaría que el tiempo seguirá.
Según los expertos, los mayas antiguos estaban extremadamente interesados en los eventos futuros, incluso más allá del 21 de diciembre. “Hay muchos monumentos mayas antiguos que tratan eventos que ocurrirían mucho más en el futuro que ahora. Los mayas antiguos claramente creían en cosas que pasarían en mucho tiempo más”, indicó Geoffrey Braswell, de la Universidad de California en San Diego.
“La cuenta larga maya es como el odómetro de un vehículo. Mi primer coche tenía seis dígitos entonces llegaba a las 99.999,9 millas. Eso no significa que el carro explotaba si llegaba a las 100.000 millas”, ejemplificó.
[Fuente]
“Los mayas hicieron profecías, pero no en un sentido fatídico, sino sobre eventos que, de acuerdo con su concepción cíclica de la historia, se podían repetir en el futuro”, señaló Alfredo Barrera, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Los mayas usaban un calendario de cuenta larga para calcular periodos grandes, llamado Tziikhaab. A su vez, este incluía medidas de tiempo llamadas baktún, correspondientes a 144.000 días. En el calendario, 13 baktunes (5.125 años) constituían una “era” dentro del calendario, y de acuerdo a este cálculo del tiempo, el 21 de diciembre se terminará la quinta era del universo según los mayas, y se iniciará otra.
Lo del fin del mundo, dice el antropólogo de la Universidad de Quintana Roo, Alexander Voss, “son pensamientos que, la verdad, no tienen nada que ver con la cultura maya. Amanecerá una nueva era. Es un reinicio. Eso de buscar fines no es una cosa de la cultura maya”.
De hecho, hace poco se encontró otro calendario que incluye 17 baktunes en lugar de 13, lo que indicaría que el tiempo seguirá.
Según los expertos, los mayas antiguos estaban extremadamente interesados en los eventos futuros, incluso más allá del 21 de diciembre. “Hay muchos monumentos mayas antiguos que tratan eventos que ocurrirían mucho más en el futuro que ahora. Los mayas antiguos claramente creían en cosas que pasarían en mucho tiempo más”, indicó Geoffrey Braswell, de la Universidad de California en San Diego.
“La cuenta larga maya es como el odómetro de un vehículo. Mi primer coche tenía seis dígitos entonces llegaba a las 99.999,9 millas. Eso no significa que el carro explotaba si llegaba a las 100.000 millas”, ejemplificó.
[Fuente]
Comentarios
Publicar un comentario